Alquiler de Yates en Malta

El Gran Puerto de La Valeta es uno de los puertos más increíbles del mundo. Apenas visible desde el mar, este gran puerto natural esconde la ciudad fortaleza de La Valeta, con un remarcado carácter medieval que la convirtió en el lugar idóneo para el rodaje de Juego de Tronos. A pesar de sus antiguas calles empedradas, sus palacios barrocos, sus exóticos jardínes y sus altísimas torres, esta ciudad está viviendo un renacimiento del lujo totalmente adaptado al viajero de alta élite, con finos restaurantes y bares modernos junto a boutiques y teatros de ópera.

El yate saldrá temprano para transportarte a una zona distinta de Malta, en la que los escarpados acantilados de la costa llegan a las aguas cristalinas, las cuevas marinas brillan con un azul etéreo y los pueblos pintorescos pesqueros se asientan en la orilla.

Desayuna en la cubierta mientras disfrutas del paisaje del sur antes de anclar para darte un baño en la increíble piscina de San Pedro, llamada así por el apóstol que se cree que naufragó en Malta de vuelta a Roma alrededor del año 60 después de Cristo.

Esta mañana te espera un crucero más glorioso, según avanzas por la increíble costa occidental de Malta. Comienza el día descubriendo el pintoresco pueblo pesquero de Marsaxlokk, donde los barcos pesqueros pintados de colores navegan por aguas transparentes ante un horizonte de película con cúpulas de iglesias barrocas, palmeras y fachadas moriscas. Después, relájate en la cubierta mientras tu yate se aproxima a la famosa Gruta Azul, donde la luz a la hora de comer hace que la cueva brille con un azul hipnótico.

Después, el capitán irá al norte, a Cirkewwa, donde los buceadores podrán decidir ir a bucear al pecio del remolcador Rozi o al pecio del barco hundido P29, donde las torretas de los cañones permiten hacer fotografías bajo el agua de alta calidad.

Hoy es un día de felicidad playera total. Los amantes de la playa querrán pasar la mañana en Golden Beach o en Paradise Bay, una zona más tranquila, mientras que los amantes del buceo querrán volver a Cirkewwa para bucear en el arrecife.

Tras un largo almuerzo anclado, el yate realizará el viaje hasta la isla de Comino, para llegar a la Laguna Azul, poco después de las 4 de la tarde, cuando los barcos turísticos ya se hayan ido. Es una de las lagunas más fotografiadas del Mar Mediterráneo, y no resulta extraño, puesto que sus preciosas aguas azules contrastan con las estructuras de piedra caliza que las rodean.

Levántate temprano y disfruta de la tranquilidad de la laguna dándote un baño antes de desayunar en la cubierta, con el agua salada secándose en tu piel a la luz matutina. El capitán moverá el yate antes de las 8 de la mañana para evitar que lleguen las aglomeraciones y estropeen la paz y la tranquilidad.

Si quieres más acción en las lagunas, la Laguna Esmeralda (o Laguna de Cristal) de Comino es una opción perfecta, puesto que no hay playa y solo se puede nadar desde el barco, mientras que los submarinistas preferirán dirigirse al noroeste de la isla para explorar las cuevas de Santa María.

Hay muchas opciones para pasar el día en Gozo. Una visita obligatoria para los buceadores y los submarinistas es Dwerga, que en el pasado contaba con la mítica Ventana Azul de Malta. Aquellas personas que estén tristes por el derrumbe del famoso arco de piedra caliza, se sentirán mejor al descubrir que la caída de las rocas creó un paraíso submarino para los buceadores, con grandes bloques de piedra caliza que crean pasadizos y una topografía casi escalofriante. El lugar también cuenta con el Agujero Azul, una de las zonas de buceo más grandes de toda Europa, la laguna marina interior y una bella piscina natural.

Gozo también tiene los templos de Ggantija, un conjunto de templos megalíticos de más de 5.000 de años de antigüedad que se encuentran incluidos en la lista de la UNESCO. Los amantes de la historia pueden visitar la capital de Victoria, donde una preciosa ciudadela se asienta en lo alto de una colina.

El yate saldrá pronto para volver a La Valeta, probablemente haciendo una parada para bañarse en la Bahía de San Pablo, la ubicación en la que se cree que naufragó el barco de San Pablo. Los buceadores experimentados también podrán bucear en el pecio del Águila Imperial y en la estatua de Jesús del fondo marino, finalizando la gran experiencia de fletamento de un yate en Malta.